Hablamos y hablamos de la necesidad de mantener el medio ambiente aunque no sea más que para dejar algo de vida a los que vienen detrás, aunque sólo sea para poder disfrutar de las maravillas que la naturaleza nos ofrece y... cada vez más contribuimos a la destrucción de todo aquello por lo que deberíamos luchar.

El mantenimiento de los espacios verdes, de las costas y del entorno natural en general, es una necesidad cada vez más acuciante, algo de lo que parece no queremos darnos cuenta.
Tengo la suerte de tener un parque al lado de casa y la desgracia de ver como día a día se va destruyendo por falta de cuidados y por un mal uso, claro está.
He llegado incluso a ofrecer mis servicios al ayuntamiento de la localidad en la que resido para realizar, de forma gratuita naturalmente, el servicio de mantenimiento.
Un camión de riego acaba de pasar junto a mi ventana, pensé que por fín llegaba la hora de que estos pobres árboles recibieran el agua tan anhelada y, para mi sorpresa, ha pasado de largo, supongo que camino de jardines más céntricos, no sé, no entiendo nada.